Manuel Villares nació en 1913 en el barrio de Vale, en la parroquia castropolense de Barres, y murió el 15 de enero de 1942 en el campo de concentración de Mauthausen-Gusen, en Austria. Fue uno de los 190 asturianos deportados a los campos de exterminio nazi y su historia ha sido rescatada del olvido gracias a la colocación de un "stolpersteine" o piedra de la memoria que le recordará para siempre. Es la primera piedra de este tipo que se coloca en el Occidente, de las 45 ya instaladas en diferentes puntos de Asturias.